El conseller de Infraestructuras y Transportes, Mario Flores, y la directora gerente de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), Marisa Gracia, inauguraron el pasado 22 de junio en la estación de Mercado del TRAM de Alicante, la exposición ‘Botijos’ del artista valenciano Nacho Murillo. Por tercer año consecutivo y en plenas fiestas de Hogueras los amplios espacios de la estación subterránea del TRAM de Alicante se llenan de arte con la intervención de un artista, en una clara puesta por acercar la cultura a los usuarios.

La muestra ‘Botijos’, del valenciano Nacho Murillo, consiste en la instalación de 2.000 botijos de la alfarería La Navá por los diversos escenarios de esta estación, con lo que el artista pretende realizar un original homenaje a la funcionalidad y estética de esta pieza, más concretamente al botijo fabricado en Agost, y a los profesionales de este gremio. “No se trata de una exposición artesanal, sino de una instalación de arte contemporáneo”, afirma Murillo. “La muestra es un homenaje al diseño, el botijo ha pasado de ser una pieza útil a un mero souvenir, un icono escultórico contemporáneo”

María Aranguren, comisaria de la exposición, ha explicado que el artista se acerca al espacio para interrelacionarse con él, respetando su arquitectura, y ha destacado que la estación de Mercado es un “continente arquitectónico excepcional”.

La acumulación, las diversas formas de apilar y ordenar y la compleja relación entre continente y contenido son algunos de los temas de esta instalación que se inaugura el próximo lunes y que se desmantelará en septiembre, con el reparto de los 2.000 botijos entre los usuarios del TRAM de Alicante.

Nacido en Valencia en 1958, Nacho Murillo compaginó sus estudios de Medicina con trabajos sobre pintura en el estudio de Miquel Vaquer. A lo largo de su carrera artística, ha desarrollado una polifacética actividad profesional como galerista, anticuario, pintor y diseñador de muebles y objetos para la empresa Woodword and Lothrop de Nueva Cork.

Murillo estuvo al frente de la galería valenciana La Ventana durante cinco temporadas y sus exposiciones han viajado desde el Círculo de Bellas Artes de Valencia, el Palau de la Música y UNICEF hasta la Feria Interarte o la Feria Arco de Madrid, en la que ha expuesto durante ocho ediciones con la Galería La Nave de Valencia. Su obra se encuentra en numerosas colecciones privadas e institucionales como el Museo Thyssen o el Reina Sofía, y en diversas ciudades norteamericanas y europeas, como Lisboa o Gante, en Bélgica.

Un artista sin miedo, un pintor amante de una profesión arriesgada, pero que consigue mantenerme despierto. Así es y así se define Nacho Murillo. Su última aventura tiene como escenario Pekín y con su participación en un proyecto conocido como Work in Progress, que consiste en residir y dormir durante un tiempo en el estudio de una galería, donde puede ser visto y visitado por el público asistente. Este proyecto es conocido como “artistas en residencia y trabajo en proceso”.